Día Mundial del Alzheimer
21 septiembre 2019: Día Mundial del Alzheimer
¡Hola, hermana pequeña!
Si, mañana será el Día Mundial del Alzheimer, pero me voy a adelantar un poquito. Espero que os ayude a comprender mejor a las personas que la padecen. ¡Ánimo con la lectura!
El Alzheimer es una enfermedad degenerativa del sistema nervioso, la forma más común de la demencia, y no solo afecta a la dificultad de recordar, sino que además afecta a algunas habilidades cognitivas. Esta enfermedad está asociada a las personas mayores (a partir de 65 años), aunque la pueden presentar personas jóvenes.
Los síntomas del inicio del Alzheimer son:
- Dificultad a la hora de retener nueva información.
- Desorientación de tiempo y lugar.
- Deterioro de las relaciones sociales: familiares, amigos, compañeros…
- Predisposición al aislamiento.
- Cambios de humor, con el tiempo las personas tienden a ser más agresivas.
- Dificultad para realizar actividades cotidianas: comunicarse, caminar y comer.
Hoy en día se desconoce el origen de la enfermedad, pero se sabe
que está asociada a la reducción de algunos neurotransmisores como la
acetilcolina, glutamato, serotonina y neuropéptidos. Las placas seniles
(depósitos amieloides) se acumulan en la materia gris del cerebro, alterando la
transmisión sináptica. Por otro lado, la acumulación de fosfoproteínas Tau
dentro de las neuronas, desestabiliza los microtúbulos. Estos dos factores provocan
la enfermedad de Alzheimer.
Hábitos saludables y nutrición
Como buenos hábitos de salud, diariamente debemos: comer de
manera saludable, hacer ejercicio regularmente, evitar el sobrepeso, dormir las
horas necesarias, no fumar, mantener buenas relaciones sociales y utilizar
protección solar.
Como veremos, actualmente la enfermedad de Alzheimer no
tiene cura, por lo tanto, las medidas preventivas son de gran importancia para
evitar el desarrollo de esta enfermedad.
La dieta mediterránea está asociada a la reducción del
declive de la cognición y por ello se presenta un menor riesgo de padecer la
enfermedad de Alzheimer.
La dieta mediterránea promueve que se consuman en grandes
cantidades las verduras, frutas, cereales y legumbres. La fuente de proteína
animal se obtiene principalmente del pescado y de carnes blancas, mientras que
las carnes rojas se considera que unas cantidades menores son más adecuadas. En
general se aconseja el consumo de aceite de oliva virgen frente a otros tipos
de aceites/grasas (girasol/mantequilla). Además, se aceptan pequeñas cantidades
de bebidas fermentadas como la cerveza o el vino y evitar los dulces y
refrescos azucarados.
Dicho de otra manera, hay que reducir el consumo de hidratos
de carbono y carnes, aumentando el consumo de vegetales y grasa monoinsaturadas
(aceite de oliva virgen).
Terapéutica - Farmacología
Hoy en día la farmacología sirve para disminuir los síntomas
de la pérdida de memoria y otras funciones cognitivas, ya que, en sí, no tiene
cura.
Inhibidores de la colinesterasa (AchE). Mejoran la
comunicación entre las células, aumentando los neurotransmisores.
- Donepezilo (Aricept®)
- Rivastigmina (Prometax®)
- Galantamina (Reminyl®)
Receptores antagonistas de NMDA. Reducen los síntomas de las funciones
cognitivas y los cambios de humor. Por lo general se utiliza en combinación con
los inhibidores de la colinesterasa (AchE).
- Memantina (Ebixa®)
Para los cambios de humor característicos de la enfermedad
de Alzheimer, se suelen prescribir también antidepresivos, antiepilépticos y
antipsicóticos.
Comentarios
Publicar un comentario